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«Era como traspasar la impostura de la sacralidad para entrar en el cuadro y apropiarme de él, de todo el genio que había detrás de la imagen y que funcionaba como un mecanismo de precisión; el engranaje de un reloj que llevara cientos de años ... Seguir leyendo
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«Era como traspasar la impostura de la sacralidad para entrar en el cuadro y apropiarme de él, de todo el genio que había detrás de la imagen y que funcionaba como un mecanismo de precisión; el engranaje de un reloj que llevara cientos de años oculto, sin detenerse. -Joven, no mire demasiado esa tela, pues caería en la desesperación -dijo Horacio, haciéndome volver del embeleso.» José Federico Burgos malvive en Guadalajara como copista de cuadros del Renacimiento cuando es abordado por un excéntrico y embaucador anticuario para falsificar una pintura del artista flamenco Gossaert Mabuse, del siglo XVI. Consiente con la esperanza de hacer realidad su sueño de dedicarse en cuerpo y alma a su propia pintura. Confinado en la finca del tiránico coleccionista, comienza una particular aventura metafísica e iniciática en la que deberá sortear extrañas y perturbadoras peripecias. Con esta obra de ritmo vertiginoso, cuyos temas principales son, en palabras de la autora, «el silencio, el arte y Juan Rulfo», Ave Barrera (Guadalajara, México, 1980) ganó el Premio Latinoamericano de Primera Novela Sergio Galindo de la Universidad Veracruzana en 2013. «Ave apenas empieza a volar» DIARIO XALAPA «Una obra acerca del poder que le otorgamos a las cosas, una discusión sobre el fondo y la forma de la obra artística, un muestrario de la conducta humana, sobre todo cuando linda con la locura» Marcial Fernández, EL ECONOMISTA