Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia mientras navega. Las cookies que se clasifican según sea necesario se almacenan en su navegador, ya que son esenciales para el funcionamiento de las características básicas del sitio web. También utilizamos cookies de terceros que nos ayudan a analizar y comprender cómo utiliza este sitio web. Estas cookies se almacenarán en su navegador solo con su consentimiento. También tiene la opción de optar por no recibir estas cookies. Pero la exclusión voluntaria de algunas de estas cookies puede afectar su experiencia de navegación.
Imprescindibles
Las cookies necesarias son absolutamente esenciales para que el sitio web funcione correctamente. Esta categoría solo incluye cookies que garantizan funcionalidades básicas y características de seguridad del sitio web. Estas cookies no almacenan ninguna información personal.
No imprescindibles
Estas cookies pueden no ser particularmente necesarias para que el sitio web funcione y se utilizan específicamente para recopilar datos estadísticos sobre el uso del sitio web y para recopilar datos del usuario a través de análisis, anuncios y otros contenidos integrados. Activándolas nos autoriza a su uso mientras navega por nuestra página web.
En el mediodía del 1 de abril de 1959, Francisco Franco inauguró la majestuosa basílica del Valle de los Caídos, un monumento que simbolizaba su poder absoluto. Sin embargo, en la sombra de este evento se oculta un oscuro plan que pudo haber camb... Seguir leyendo
info
En el mediodía del 1 de abril de 1959, Francisco Franco inauguró la majestuosa basílica del Valle de los Caídos, un monumento que simbolizaba su poder absoluto. Sin embargo, en la sombra de este evento se oculta un oscuro plan que pudo haber cambiado el curso de España. El partido comunista noruego, en colaboración con la clandestina CNT en el exilio, dio vida a la Operación Filisteos. Su objetivo: atentar contra Franco y su gobierno, desafiando la tiranía del Caudillo y el Movimiento Nacional. Un intrépido barrenero noruego fue enviado a España, con la misión de introducir cartuchos de dinamita a través del maquis liderado por Quico Sabaté. Su cometido era claro: hacer estallar el risco de las Navas el día de la inauguración de la basílica, y con ello, poner fin a una era. Pero el destino es caprichoso, y la intuición de un comisario de policía y la suerte conspiraron para evitar la tragedia en ese día crucial. Cincuenta años después, un joven periodista se adentra en los recuerdos ocultos y los secretos enterrados para descubrir la verdad detrás de la Operación Filisteos, un intento fallido de poner fin al franquismo en la inauguración de ese colosal mausoleo.