Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia mientras navega. Las cookies que se clasifican según sea necesario se almacenan en su navegador, ya que son esenciales para el funcionamiento de las características básicas del sitio web. También utilizamos cookies de terceros que nos ayudan a analizar y comprender cómo utiliza este sitio web. Estas cookies se almacenarán en su navegador solo con su consentimiento. También tiene la opción de optar por no recibir estas cookies. Pero la exclusión voluntaria de algunas de estas cookies puede afectar su experiencia de navegación.
Imprescindibles
Las cookies necesarias son absolutamente esenciales para que el sitio web funcione correctamente. Esta categoría solo incluye cookies que garantizan funcionalidades básicas y características de seguridad del sitio web. Estas cookies no almacenan ninguna información personal.
No imprescindibles
Estas cookies pueden no ser particularmente necesarias para que el sitio web funcione y se utilizan específicamente para recopilar datos estadísticos sobre el uso del sitio web y para recopilar datos del usuario a través de análisis, anuncios y otros contenidos integrados. Activándolas nos autoriza a su uso mientras navega por nuestra página web.
El caballo se comunica a través de un lenguaje corporal, silencioso, por medio de señales, posturas, resonancias energéticas, también de un lenguaje químico y en menor medida por vocalizaciones propias de su especie. Para comprenderlos es necesa... Seguir leyendo
info
El caballo se comunica a través de un lenguaje corporal, silencioso, por medio de señales, posturas, resonancias energéticas, también de un lenguaje químico y en menor medida por vocalizaciones propias de su especie. Para comprenderlos es necesario conocer ese mundo comunicativo y para curarlos cuando se enferman hay que trabajar tanto el plano físico como el anímico y el energético. La autora ha desarrollado una terapia integradora basada en la comunicación con el caballo, gracias a la cual trabaja con ellos en planos profundos y sutiles. Es decir, que, además de tratar su sintomatología clínica, trabaja con su estado de ánimo en busca de la resolución de conflictos para devolverles su dignidad animal, muy despreciada en algunos ámbitos, donde los caballos son tratados como máquinas al servicio del ego cuando se cierran los ojos a sus necesidades. La medicina homeopática, la acupresión, las técnicas corporales, la etología o el reiki forman parte de esta terapia integral y ofrecen un modo de comunicación que posibilita tratar al animal como un todo.