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La obra de José María Merino ha recorrido muy diversos caminos: poesía, novela, cuentos, libro de viajes, ensayo. «La orilla oscura» supuso, en 1985, la consagración literaria del autor. Desde el título, se induce a pensar en un espacio limít... Seguir leyendo
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La obra de José María Merino ha recorrido muy diversos caminos: poesía, novela, cuentos, libro de viajes, ensayo. «La orilla oscura» supuso, en 1985, la consagración literaria del autor. Desde el título, se induce a pensar en un espacio limítrofe que da paso a extensiones o ámbitos inciertos y confusos. Y ese lugar oscuro es símbolo del inconsciente y del mundo de los sueños. La propuesta de una orilla oscura supone otra que no lo es y, por tanto, conduce a la noción de dualidad, de la existencia de un lado y de otro, que se convierte en la novela en una constante fluctuación textual entre la vigilia y el sueño, la realidad y la ficción, lo verdadero y lo imaginado, la vida y la literatura, motivos todos ellos recurrentes en la narrativa del autor.