Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia mientras navega. Las cookies que se clasifican según sea necesario se almacenan en su navegador, ya que son esenciales para el funcionamiento de las características básicas del sitio web. También utilizamos cookies de terceros que nos ayudan a analizar y comprender cómo utiliza este sitio web. Estas cookies se almacenarán en su navegador solo con su consentimiento. También tiene la opción de optar por no recibir estas cookies. Pero la exclusión voluntaria de algunas de estas cookies puede afectar su experiencia de navegación.
Imprescindibles
Las cookies necesarias son absolutamente esenciales para que el sitio web funcione correctamente. Esta categoría solo incluye cookies que garantizan funcionalidades básicas y características de seguridad del sitio web. Estas cookies no almacenan ninguna información personal.
No imprescindibles
Estas cookies pueden no ser particularmente necesarias para que el sitio web funcione y se utilizan específicamente para recopilar datos estadísticos sobre el uso del sitio web y para recopilar datos del usuario a través de análisis, anuncios y otros contenidos integrados. Activándolas nos autoriza a su uso mientras navega por nuestra página web.
Si yo fuera una actriz de cine y deseara la piel más luminosa del mundo, no dejaría de beber medio litro de kombucha al día. Tan sólo bebiendo durante tres días dos vasos de kombucha, la piel se aclara, se suaviza y emite una luz que no puede se... Seguir leyendo
info
Si yo fuera una actriz de cine y deseara la piel más luminosa del mundo, no dejaría de beber medio litro de kombucha al día. Tan sólo bebiendo durante tres días dos vasos de kombucha, la piel se aclara, se suaviza y emite una luz que no puede ser más que el resultado de una mejora interna en todo mi organismo. La piel no sólo se nutre de cremas, sino, y principalmente, de unos intestinos saludables. Por eso, los problemas de piel deben ser tratados desde dentro.os seres humanos sentimos la necesidad de compartir lo que nos produce bienestar. Por este motivo, introduje en España a través de mis cursos, y en especial del máster en cocina vegetariana que dirijo, el arte de la fermentación basada en plantas, formando a futuros profesionales que, a su vez, incorporan y divulgan las técnicas de la fermentación en su cocina.oy he sentido la necesidad de compartirlo también contigo. No sólo por la belleza del acto en sí de fermentar, sino también porque entiendo que hoy más que nunca queremos volver a lo natural, a lo artesano, a lo saludable, a lo económico y hecho en casa con nuestro cariño y nuestro tiempo. Fermentar es una tarea que puede englobar a uno o a muchos. En mis cursos, mientras los alumnos preparan chucrut o kimchi, disfrutamos de música que eleva el espíritu, nos calma, nos ayuda a introducir el mindfulness en la cocina, a relacionarnos con amor con los alimentos y a ser agradecidos. Después, estos fermentados vegetales se pueden comer en familia y disfrutar no sólo de su sabor, sino también de todas sus propiedades curativas, amén de la satisfacción que da saber que estás comiendo algo hecho con tus manos y para lo que has tenido que esperar. Todos los fermentados que vas a aprender a elaborar en este libro están adaptados a nuestra cocina. He utilizado ingredientes locales para fermentar o para aderezar los fermentos japoneses, birmanos, coreanos, chinos, alemanes o rusos. Estoy feliz de poder acercar al paladar mediterráneo los sabores umami, en japonés 'agradable', 'sabroso', o sabores completos de los fermentados más exóticos que satisfacen el paladar, con los que agasajo también a mis huéspedes en el hotel rural La Fuente del Gato.