Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia mientras navega. Las cookies que se clasifican según sea necesario se almacenan en su navegador, ya que son esenciales para el funcionamiento de las características básicas del sitio web. También utilizamos cookies de terceros que nos ayudan a analizar y comprender cómo utiliza este sitio web. Estas cookies se almacenarán en su navegador solo con su consentimiento. También tiene la opción de optar por no recibir estas cookies. Pero la exclusión voluntaria de algunas de estas cookies puede afectar su experiencia de navegación.
Imprescindibles
Las cookies necesarias son absolutamente esenciales para que el sitio web funcione correctamente. Esta categoría solo incluye cookies que garantizan funcionalidades básicas y características de seguridad del sitio web. Estas cookies no almacenan ninguna información personal.
No imprescindibles
Estas cookies pueden no ser particularmente necesarias para que el sitio web funcione y se utilizan específicamente para recopilar datos estadísticos sobre el uso del sitio web y para recopilar datos del usuario a través de análisis, anuncios y otros contenidos integrados. Activándolas nos autoriza a su uso mientras navega por nuestra página web.
Londres, años treinta. Una larga cola frente al teatro Woffington espera impaciente para ver la comedia musical del momento. De pronto, un hombre parece desmayarse en medio de la multitud. Es Bert Sorrell, un joven corredor de apuestas, y acaba de s... Seguir leyendo
info
Londres, años treinta. Una larga cola frente al teatro Woffington espera impaciente para ver la comedia musical del momento. De pronto, un hombre parece desmayarse en medio de la multitud. Es Bert Sorrell, un joven corredor de apuestas, y acaba de ser apuñalado por la espalda con una fina daga. Ni el estado de shock de la señora Ratcliffe, testigo más próxima a la víctima, ni el té en el camerino de la encantadora Ray Marcable, estrella del musical, ni las alocadas teorías anarquistas de la señora Field, casera de Alan Grant, parecen arrojar luz al caso. Y sin embargo nuestro intuitivo inspector de Scotland Yard ya tiene a su culpable: se trata de Jerry Lamont, mejor amigo de Sorrell, un hombre de aspecto extranjero que huyó precipitadamente de la cola el día de autos y cuya pista se sitúa ahora en un pueblecito de las Highlands. Con su traje de pesca en la maleta a modo de camuflaje, Grant se sube al primer tren rumbo a Escocia dispuesto a cazar a su asesino y a disfrutar después de una placentera jornada de pesca. Pero no es oro todo lo que reluce, y puede que este caso tenga algún que otro cabo suelto que atar (y más de un prejuicio a desterrar). El hombre en la cola es el primer caso del inspector Alan Grant, un misterio londinense lleno de ingenio, humor británico y velada crítica a los clichés de la época.